La prevalencia del ciberacoso se ha disparado en los últimos años. Con los nuevos medios y modos de comunicación surgen nuevas oportunidades para que la gente sufra malos tratos. La gente puede hacer uso de las redes sociales, los mensajes de texto, los tablones de anuncios y los vídeos compartidos, entre otras cosas, para humillar y dañar a otros. Hasta la fecha, la mayoría de las personas que han estudiado el ciberacoso se han centrado en cómo y por qué se produce, las señales de advertencia del ciberacoso, la concienciación de los padres y muchas otras cuestiones. Un aspecto de este problema que aún no se ha analizado en profundidad tiene que ver con las causas del ciberacoso. ¿Se acosa a más gente porque hay más formas de hacerlo? ¿Identifica el ciberacoso nuevas víctimas que de otro modo no serían acosadas? Los investigadores han publicado recientemente un estudio que analiza las causas del ciberacoso, y sus conclusiones son un tanto sorprendentes.
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Los autores de otro estudio reciente afirman que el problema del ciberacoso sigue estando muy extendido
Lo más probable es que casi todos los niños tengan un acosador cibernético en su vida, lo sepan o no. Hasta hace relativamente poco, la sociedad no había aprendido mucho sobre la naturaleza del ciberacosador, ya que esta forma de acoso sólo se hizo prevalente con el crecimiento de Internet. Cada vez son más los profesionales que indagan en este problema. Parece que están aprendiendo valiosas lecciones. Una de esas lecciones identificadas por varios estudios se refiere a la profundidad y el alcance de este grave problema. Un estudio reciente centrado en los jóvenes de Nueva York mostraba cuántas personas se habían topado al menos con un acosador cibernético mientras estaban en línea. Tal vez, a medida que más personas sepan que todos los niños están expuestos a este tipo de sufrimiento, más gente tomará medidas para proteger a sus propios hijos.
Acerca del estudio sobre el ciberacoso
En el estudio han colaborado investigadores del Siena College Research Institute, AT&T y la Fundación Tyler Clementi. Los interesados en leer una descripción de la investigación pueden encontrarla aquí. Los investigadores realizaron 1.255 entrevistas en línea a alumnos de 6º a 12º curso de las regiones occidental y norte del estado de Nueva York. También entrevistaron a 1.048 padres de alumnos de centros que participaban en la encuesta.
Los investigadores descubrieron lo siguiente:
- El 26% de los estudiantes encuestados del norte del estado de Nueva York habían sufrido ciberacoso.
- El 55% de los adolescentes del oeste de Nueva York han sido testigos de ciberacoso.
- Más de la mitad de los padres del oeste de Nueva York habían sido testigos de ciberacoso.
- Más del 20% de los adolescentes del oeste de Nueva York son testigos de ciberacoso al menos un par de veces al mes.
El estudio reveló lo siguiente en relación con los adolescentes que se habían topado con al menos un ciberacosador:
- Casi el 33% de los adolescentes "se rieron" cuando vieron algo negativo publicado sobre ellos en Internet.
- El 9% de los adolescentes lloraron cuando vieron algo negativo en Internet sobre ellos o alguien cercano.
- El 41% de los adolescentes que se habían enfrentado a un ciberacosador se lo contaron después a un amigo.
- El 48% de los adolescentes ciberacosados hablaron con sus padres.
- Un tercio de esos adolescentes se enfrentaron finalmente al presunto acosador cibernético.
- El 20 por ciento de los adolescentes acosados se lo contó a las autoridades escolares.
Definición del ciberacoso
A efectos de este estudio, los investigadores definieron el ciberacoso como la publicación en línea de alguno o todos los elementos siguientes:
- Comentarios insultantes
- Comentarios amenazadores
- Fotos para avergonzar
- Vídeos reveladores
- Rumores
- Acusaciones de actividad sexual
StopBullying.gov identifica el ciberacoso como "el acoso que tiene lugar utilizando tecnología electrónica. La tecnología electrónica incluye dispositivos y equipos como teléfonos móviles, ordenadores y tabletas, así como herramientas de comunicación que incluyen sitios de redes sociales, mensajes de texto, chat y sitios web." La misma organización define el acoso como "un comportamiento agresivo no deseado entre niños en edad escolar que implica un desequilibrio de poder real o percibido. El comportamiento se repite, o tiene el potencial de repetirse, a lo largo del tiempo. El acoso incluye acciones como amenazar, difundir rumores, atacar a alguien física o verbalmente y excluir a alguien de un grupo a propósito".
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Sobre el ciberacosador
El estudio también analizó detenidamente la naturaleza del ciberacosador. Quienes respondieron a la encuesta y admitieron haber actuado como ciberacosadores en el pasado dieron las siguientes razones para actuar así:
- Querían vengarse de alguien.
- Estaban enfadados con alguien o por algo.
- Los acosadores cibernéticos simplemente pensaron que lo que publicaron era gracioso.
Además de la motivación para el ciberacoso, quienes participaron en esta conducta enumeraron las siguientes razones por las que atacaron a otra persona en línea:
- El 39% atacó el aspecto físico.
- El 27% se burló de la torpeza social del objetivo.
- El 28% acosaba cibernéticamente porque pensaba que su objetivo era gay.
- El 25% atacó a otra persona por la ropa que llevaba.
- El 25% de los ciberacosadores atacaron a otros por tener algún tipo de discapacidad.
- El 22% de los ciberacosadores atacaron a otros por su falta de capacidad atlética.
- El 14% de los acosadores en línea atacaron a otros por ser sexualmente activos.
El estudio también reveló que un acosador cibernético no es necesariamente inconsciente del daño que inflige a los demás con esta conducta. Según la encuesta:
- El 12% de los adolescentes publicó algo en Internet de lo que se arrepiente.
- El 6% de los ciberacosadores había publicado algo que acabó hiriendo a alguien.
- El 2% de los adolescentes publicaron algo de lo que se avergonzaban y que aún estaba disponible en Internet.
Cómo los adolescentes se convierten en objetivos
Además, el estudio revela lo vulnerables que pueden ser los adolescentes a cualquier ciberacosador basándose simplemente en la cantidad de tiempo que un adolescente medio pasa en línea. Según los investigadores:
- El 91% de los adolescentes declararon que pasan más de una hora al día conectados a Internet jugando a vídeos o videojuegos.
- El 79% de los encuestados pasa al menos una hora al día en Internet socializando con sus amigos.
- El 82% de los adolescentes tiene su propio smartphone.
- Casi un tercio de los adolescentes habían compartido su nombre y sexo con alguien a quien sólo conocían por Internet.
- El 5% había accedido a quedar con alguien a quien sólo había conocido por Internet.
El ciberacoso y los padres
El estudio también revela que los padres que fueron entrevistados como parte de este proceso parecen estar más concienciados e implicados en la prevención del ciberacoso de lo que han mostrado otros estudios. Ya hablamos aquí de un estudio que mostraba un número sorprendentemente bajo de padres que pensaban que el ciberacoso les preocupaba. En este estudio, los padres afirmaban lo siguiente:
- Casi todos los padres habían hablado con sus hijos sobre el ciberacoso.
- El 97% de los padres afirma haber enseñado a sus hijos a no revelar información personal en Internet.
- El 40% de los padres tienen normas relacionadas con la tecnología que hacen cumplir estrictamente.
- El 47% tiene normas, pero no las hace cumplir.
- El 13% de los padres permite a sus hijos tomar sus propias decisiones sobre su comportamiento en Internet.
Cómo pueden ayudar los abogados especializados en derechos del menor
Puede que esta investigación se centre en los jóvenes y sus padres de Nueva York, pero cabe afirmar que las encuestas realizadas en otras partes de Estados Unidos probablemente arrojarían resultados algo similares. Si cree que su hijo es un acosador cibernético, debe ponerle fin cuanto antes. También debe tomar medidas para devolver a su hijo la dignidad, el orgullo y la sensación de seguridad si ha sido acosado en Internet. Si necesita ayuda especifica que no esta recibiendo, contacte a los abogados de derechos de menores en Gomez Trial Attorneys hoy para una evaluacion gratuita de su caso.
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Otro estudio sobre las causas del ciberacoso
Investigadores del Reino Unido han realizado un estudio. Quienes deseen leerlo pueden encontrarlo aquí. Los investigadores, de la Universidad de Warwick, trabajaron con 2.745 estudiantes de entre 11 y 16 años que asistían en ese momento a centros de enseñanza secundaria del Reino Unido. Los estudiantes respondieron a preguntas presentadas en una encuesta electrónica. Estas preguntas se centraban en la implicación en el acoso, la autoestima y los problemas de comportamiento. Los distintos tipos de acoso y otros términos recibieron diferentes apelativos y abreviaturas, entre ellos:
- DV-Victimización directa o acoso directo en persona
- RV-Victimización relacional o acoso relacional
- CV-Victimización cibernética o ciberacoso
- IC-Intervalos de confianza
Los investigadores identificaron los siguientes datos, basándose en las respuestas facilitadas:
- El 29,3% de los encuestados sufrió algún tipo de acoso.
- El 28% de los encuestados había sufrido violencia doméstica o victimización directa.
- La VD pura, la VR pura y la VD y VR combinadas representaron casi tres cuartas partes de todos los casos de acoso.
- Aproximadamente el 4% de los estudiantes sólo había sufrido ciberacoso.
- La CV se produjo en un contexto de acoso "tradicional" más del 85% de las veces.
Ciberacoso y problemas psicológicos subsiguientes
Hemos hablado del daño potencial infligido por el acoso en general. Parece claro que muchos niños que soportan el acoso van a sufrir por ello más adelante en su vida. Los investigadores de este estudio también analizaron las posibles consecuencias a largo plazo del acoso. En concreto, intentaron medir los tres factores siguientes en alumnos que habían sido acosados:
- Dificultades de comportamiento
- Dificultades emocionales
- Problemas de autoestima
Los investigadores descubrieron que los que sólo habían sufrido ciberacoso experimentaban aproximadamente el mismo tipo de dificultades que los estudiantes que sólo habían sufrido formas más tradicionales de acoso. Aquellos sujetos que habían soportado múltiples formas de acoso sufrían problemas de comportamiento, emocionales y de autoestima más graves como consecuencia de su maltrato. Un ejemplo de consecuencias a largo plazo sería también el estudio en relación con el aumento del riesgo de sobrepeso debido al acoso escolar.
El desafío al pensamiento convencional
Este estudio representa un desafío a lo que se estaba convirtiendo en el pensamiento convencional con respecto al ciberacoso. Ese pensamiento básicamente afirmaba que la introducción de todas estas formas diferentes de tecnología creaba más oportunidades para el acoso y, como resultado, más víctimas de acoso. En cambio, este estudio parece indicar que estas salidas tecnológicas son básicamente otra salida para el acoso que se produciría de todos modos. En esencia, el ciberacoso es un síntoma de una enfermedad mayor y no la raíz de un problema independiente. Las causas del ciberacoso se remontan, en su mayor parte, a formas más "tradicionales" de acoso escolar. Los investigadores no creen que el ciberacoso por sí solo sea una epidemia.
Por supuesto, hay diferencias importantes entre el ciberacoso y otros tipos de acoso, y los autores se refieren a ellas. En primer lugar, el ciberacoso se extiende mucho más allá de la escuela. En esencia, el ciberacoso perpetúa el acoso en casa o dondequiera que se encuentre la víctima en ese momento. El acoso tradicional requería que la víctima estuviera presente. El ciberacoso sólo requiere una conexión a Internet. Además, el ciberacoso puede crear una audiencia mayor que el acoso tradicional dependiendo de cómo se produzca.
Estadísticas sobre ciberacoso
A pesar de la aparente falta de ciberacoso que se produce por sí solo, tal y como se expone en este estudio, en general no se discute que el ciberacoso es extremadamente común. Según BullyingStatistics.org, los siguientes datos se refieren al ciberacoso:
- Más de la mitad de los adolescentes han sufrido ciberacoso.
- Aproximadamente el mismo porcentaje de adolescentes admite haber sufrido ciberacoso.
- Más de un tercio de los menores de 18 años han sido amenazados en Internet.
- Más del 25% de los adolescentes han sufrido ciberacoso en repetidas ocasiones.
- La inmensa mayoría de los adolescentes no cuentan a sus padres cuando han sufrido ciberacoso.
Los interesados en un desglose completo de estas estadísticas pueden encontrarlo aquí. Estas estadísticas y los resultados de este estudio no se excluyen mutuamente. En todo caso, indican que el acoso en todas sus formas es algo que todos los padres y todos los adultos que trabajan con jóvenes deben vigilar de cerca.
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Cómo pueden ayudar los abogados especializados en derechos del menor
A veces puede ser difícil saber cuándo un niño está siendo acosado. Más difícil aún puede ser saber cuándo un niño está siendo ciberacosado. También hemos hablado recientemente de las señales de advertencia del acoso, y la gente debería estar familiarizada con ellas. Quienes sospechen que algo va mal deben confiar en su instinto, ya que el acoso puede tener graves consecuencias. Cada día es una oportunidad para intervenir y poner fin a esta conducta perjudicial.
Si sospechas de un caso de acoso y actúas poniéndote en contacto con quienes están en condiciones de abordarlo adecuadamente, puede que aún no hayas hecho lo suficiente. Tienes que asegurarte de que los responsables de tratar el problema lo hacen rápidamente. En algunos casos, el seguimiento puede requerir dar el siguiente paso si quienes están en posición de hacerlo no actúan o no lo hacen lo suficiente. Si usted se encuentra enfrentando esta dificil situacion, usted necesita buscar la ayuda de abogados de derechos del nino que entienden lo que se necesita para defender los derechos de aquellos que estan siendo intimidados. Póngase en contacto con Gomez Trial Attorneys hoy por teléfono al (619) 237-3490 o en línea para una evaluación gratuita de su caso.
